lunes, 9 de febrero de 2009

El lince en peligro de extinción

Parece ser que el lince ibérico, felino endémico de tierras peninsulares, se encuentra en serio peligro de extinción, junto a otras especies como el lobo o el oso pardo. Tanto la destrucción de su hábitat como la caza ilegal lo tienen contra las cuerdas, y se estima que como máximo en diez años podría dejar de existir el último ejemplar.

Suerte que uno de ellos, residente en el Parque Nacional de Doñana, y conocido por su naturaleza inquieta, se ha enterado medio de casualidad gracias a que hace unos días se coló en las oficinas de los cuidadores y se hizo con una publicación que se hacía eco de la noticia. Un empleado del Parque asegura haberlo visto corriendo como alma que lleva el diablo, agitando la revista, y dirigirse al resto de sus congéneres en los términos: "¡A follar, a follar, que se acaba el mundooooo!"

Desde entonces, y no con poco asombro, desde la sala de control del Centro de Cría del Parque han comprobado que durante los seis o siete días que dura el celo de las hembras, pueden llegar a mantener hasta ¡ochenta! cópulas en un periodo de cuarenta y ocho horas.

Están algo lejos de las doscientas del león, pero para un animalito un poco más grande que un gato, tiene su mérito. Lo que tienen claro es que si se extinguen, desde luego que no va a ser por falta de voluntad de ellos.